Criando a nuestros hijos y comunicándonos con ellos todos los días, rara vez pensamos en cómo nos perciben. Hay varias frases que los niños deben repetir todos los días para que crezcan felices.
10. Tendrás éxito (creo en ti)
En la infancia, incluso las tareas pequeñas a veces parecen enormes y difíciles para un niño. Esto se debe a la razón por la cual su hijo aún no es consciente de todas sus habilidades y capacidades. Por lo tanto, el estímulo de los padres es muy importante para la motivación e inspiración del niño. Todos los días, repita que un hijo o hija puede resolver cualquier problema. Entonces, el bebé desde una edad temprana no tendrá miedo a las dificultades y aprenderá a superarlas. Y en el futuro, es el apoyo de los padres lo que infundirá confianza en la fortaleza y la determinación de un niño adulto, lo cual es muy importante para cualquier adulto.
9. Eres inteligente
La baja autoestima no es solo en adultos. Los niños también pueden pensar muy mal de sí mismos. Se comparan con otros niños y están muy molestos si piensan que la comparación no está a su favor. Y solo en el poder de los padres para convencer al niño de que sus habilidades mentales no son inferiores a las de sus compañeros. Si no le dice al niño que es inteligente, en cualquier situación difícil que surja, él dejará caer sus manos y escribirá todo por falta de mente. Y la comprensión de que los padres creen en el poder de su intelecto ayudará al niño a resolver con éxito las tareas aparentemente más imposibles.
8. Siempre estoy contigo
Hasta que su hijo haya madurado, sea independiente y no haya comenzado su propia familia, son los padres quienes siguen siendo las personas principales en su vida. Con el tiempo, los niños entienden que los amigos pueden ser un fenómeno inminente en la vida, pero la familia es lo único que realmente tienen. Por lo tanto, desde los primeros años es importante que el bebé entienda que siempre estás ahí y listo para apoyarlo en cualquier momento. Recuerde a su hijo o hija que pueden contar con su ayuda y comprensión en cualquier situación.
7. ¿Cómo estuvo tu día?
Cada final del día debe celebrarse con una conversación familiar sobre cómo alguien pasó el día. Después de todo, algo interesante nos sucede todos los días, y es importante para nosotros compartir esto con sus seres queridos. Un niño tampoco es una excepción. Cuando lo recoja de un jardín de infantes o de una escuela o simplemente se siente a cenar juntos el fin de semana, pregunte cómo pasó el día el niño. Pero no se puede pedir mecánicamente, solo para mostrar. Incluso si su propio día fue duro y está cansado, escuche con atención y responda activamente a las palabras de los niños. Son esas conversaciones sinceras las que le ayudarán en el futuro a mantener una relación cálida con su hijo cuando crezca.
6. Siento pena por ti
Desde la altura de los últimos años, nosotros, los adultos, vemos el dolor de los niños como una pequeña bagatela. Después de todo, nuestros problemas son realmente importantes, y las penas de los niños no tienen sentido. Ni siquiera queremos empatizar sinceramente con los insultos y las penas de los niños, y esto es en vano. Los adultos saben que todos sus problemas serán resueltos y olvidados de alguna manera, y el niño verá sus penas como grandes y serias. Por lo tanto, siempre trate de profundizar en el problema de los niños y decirle a su bebé que simpatiza y comprende lo que hay en su alma en este momento. Este será un gran apoyo para el niño.
5. No te rindas
Los adultos saben por su propia experiencia que no tiene sentido tener miedo a las dificultades. Pero los niños no tienen idea de esto. Por lo tanto, pueden pasar ante cualquier situación difícil. Y para que el niño tenga confianza en sí mismo y sea capaz de resolver problemas complejos, los padres deben enseñarle a lidiar con los fracasos y continuar avanzando hacia su objetivo, incluso si el bebé lo ve inalcanzable. Hágale saber a su hijo que está bien cometer errores, pero es importante no rendirse y seguir intentándolo.
4. confío en ti
Cuando un niño planea hacer algo o ya lo ha hecho y se lo cuenta a sus padres, es importante que escuche lo que piensa sobre esto. La frase "Confío en ti" de mamá y papá será el mayor elogio para el niño en este caso. Su autoestima aumentará y se sentirá como un adulto. Cuando usted mismo quiere decirle al bebé algo serio y comenzar la conversación con la frase "Confío en usted, ¿puede darle consejos?". El niño inmediatamente se siente muy importante y necesario.
3. Estoy orgulloso de ti
Todo en la vida de un niño ocurre por primera vez. Por primera vez, los niños se sientan a leer libros, aprenden a lavar pisos o cocinar, resuelven su primer problema en el aula y acuden a la sección de deportes o al círculo de dibujo. Y en estos momentos, cualquier niño quiere escuchar el aliento de mamá y papá. Todos los días, el niño realiza pequeños logros o descubrimientos, y su observación "Estoy orgulloso de usted" inspirará confianza en el niño y lo llevará a nuevas victorias. Dígale esta frase a su hijo todos los días, y él comprenderá cuánto lo valora y estará orgulloso de él.
2. Abracemos
Cualquier persona experimenta varias situaciones estresantes durante el día. Y los niños también sienten, hasta cierto punto, todos los días, emoción o vergüenza. Para tranquilizar al bebé después de días laborables difíciles, solo debe comenzar abrazándolo. Los psicólogos dicen que los niños deben ser abrazados varias veces al día. Sin abrazos diarios, un niño puede convertirse en una persona indiferente. Los abrazos no solo ayudarán a reducir la ansiedad, sino que también mejorarán el estado de ánimo y acercarán al bebé a los padres.
1. Gracias!
Nunca olvide agradecerle a un niño cuando haya hecho algo que usted le pidió. Incluso lo más insignificante, en su opinión, las cosas son dignas de elogio: el bebé arregló la habitación, se vistió o lavó los platos. Incluso si el niño hizo algo malo, asegúrese de agradecerle, y solo entonces señale delicadamente las deficiencias. Es la palabra "gracias" que forma el deseo de ayudar en el futuro, le enseña al bebé a ser cortés y une a padres e hijos.